La llegada del buen tiempo y las vacaciones de semana santa nos invitan a disfrutar del sol, ya sea en la playa, en la montaña o simplemente paseando al aire libre. Pero ¿sabías que una correcta preparación y protección de la piel antes, durante y después de la exposición solar es fundamental para mantenerla saludable, luminosa y protegida?
Te compartimos una rutina natural completa para cuidar tu piel frente al sol, con el apoyo de bloqueadores solares aceites esenciales y productos naturales, ideal para quienes buscan un bronceado saludable sin comprometer la salud de su piel.
Cuidados Antes, Durante y Después de la Exposición Solar para que tu bronceado luzca espectacular y tu piel este sana y hermosa.
1. Preparación de la Piel Antes del Sol
Una piel bien preparada responderá mejor a la exposición solar y absorberá los nutrientes necesarios para mantener su elasticidad y brillo natural.
Exfoliación suave (2-3 veces por semana)
Antes de exponerte al sol, elimina las células muertas con un exfoliante natural a base de azúcar, sal marina o café molido. Puedes añadir unas gotas de aceite esencial de lavanda o naranja dulce a un buen aceite vehicular como el de almendras o el de germen de trigo, para potenciar la regeneración celular y dejar la piel suave y tonificada.
Otra buena técnica de exfoliación es el cepillado en seco utilizando un cepillo de fibras naturales o lufas de henequén e ixtle.
Hidratación profunda
Empieza recordándote que debes de tomar suficiente agua en tu dieta y evitar un golpe de calor. Posteriormente hablando de piel, la hidratación previa es clave. Aplica diariamente una mezcla de aceites vegetales corporales como el aceite de jojoba, aceite de coco o manteca de karité, enriquecido con unas gotas de aceite esencial de geranio o sándalo, conocidos por su capacidad de nutrir y equilibrar la piel.
También puedes utilizar nuestra crema de lavanda intensa o de té verde que humecta a profundidad y no deja sensación grasosa.
2. Protección Antes y Durante la Exposición Solar
La piel necesita una barrera eficaz contra los rayos UVA y UVB para prevenir daños, manchas y envejecimiento prematuro.
Uso de bloqueadores solares naturales
Opta por bloqueadores físicos o minerales con ingredientes como óxido de zinc o dióxido de titanio. Estos forman una capa protectora sobre la piel sin interferir con su respiración natural.
Si utilizas bloqueadores químicos, asegúrate de usar solo aquellos que estén libres de oxibenzona y octinoxato. Asegúrate también de utilizar productos que sean biodegradables para así no afectar a la vida marina y a los arrecifes.
Si tu bloqueador tiene una base de gel orgánico de sábila como los de Aloe Up, tu piel lo llevara a las capas más profundas de tu dermis, haciendo una protección solar más efectiva y dándote humectación desde adentro.
Recomendación especial:
Busca fórmulas con extractos de aloe vera, extractos botánicos o manteca de karité o de cacao, que además de proteger, aportan hidratación y antioxidantes.
Pre-aplicacion y Re-aplicación cada 2 horas
Todos los filtros solares requieren ser absorbidos por la piel. Date unos 20 minutos de paciencia para permitir que tu filtro solar se absorba ante de salir al sol o entrar al agua. Posteriormente, incluso los productos naturales necesitan ser reaplicados cada dos horas, especialmente si estás en el agua o sudando. No olvides zonas sensibles como orejas, cuello, empeines , atrás de las rodillas, parte superior de los pies y labios.
Para tu rostro utiliza un filtro que no sea comedogénico y que sea libre de grasa.
3. Cuidado de la Piel Después del Sol
Después de un día de sol, tu piel necesita calmarse, repararse y nutrirse. Toma mucha agua.
Ducha suave con agua templada
Evita el agua caliente que puede resecar más la piel. Usa un jabón natural sin sulfatos, preferiblemente con ingredientes calmantes como miel de abeja y avena o lavanda.
Hidratación post-solar
Aplica una loción calmante o aceite corporal. Puedes crear tu propia mezcla con:
- Aceite de almendras dulces o coco germen de trigo
- Aceite esencial de lavanda (calma e hidrata)
- Aceite esencial de menta (refresca y alivia el enrojecimiento)
- Si te quemaste un poco, puedes hacer un spray con unas gotas de aceite esencial de lavanda y de menta para ayudarte a refrescar y regenerar la piel.
Nutrición extra para un bronceado duradero
Incluye en tu dieta alimentos ricos en betacarotenos como zanahorias, mango o calabaza. Consumo muchos de estos alimentos antes, durante y después de tu vacación. El betacaroteno si hace una diferencia en tu bronceado.
Proteger tu piel del sol no significa evitarlo, sino aprender a convivir con él de forma consciente y natural. Incorporar aceites esenciales y productos naturales de protección a tu rutina solar puede marcar una gran diferencia en cómo luce y se siente tu piel. Recuerda: una piel bien cuidada es una piel sana y feliz.
Conoce nuestra guia de aromaterapia
